La artritis idiopática juvenil es la enfermedad reumática más frecuente en la infancia, una de las enfermedades crónicas más prevalentes en niños y una importante causa de morbilidad infantil.
La palabra “idiopática” es un adjetivo usado primariamente en medicina, que significa de irrupción espontánea o de causa desconocida. La combinación de raíces del griego significa “una enfermedad de causa desconocida”. deben aparecer antes de los 16 años de edad y persistir durante, al menos, 6 semanas para su diagnóstico, habiendo excluido previamente otras causas conocidas de artritis.
Se trata de enfermedades prolongadas (crónicas) que causan dolor e inflamación articular. Los nombres que describen este grupo de afecciones ha cambiado con el paso de varias décadas en la medida que se sabe más al respecto.
En ocasiones, como no se identifica la artritis en niños o adolescentes, se tildan a los pacientes de flojos, perezosos o que no quieren cumplir con sus tareas o quehaceres asignados. Esto es un estigma y retrasa considerablemente el diagnóstico temprano.
Causas
La causa de la AIJ se desconoce. Se piensa que es una enfermedad autoinmunitaria. Esto significa que el cuerpo ataca y destruye por error el tejido corporal sano.
La artritis idiopática juvenil generalmente ocurre antes de los 16 años. Los síntomas pueden empezar incluso desde los 6 meses de edad.
Tipos de AIJ
La Liga Internacional de Asociaciones de Reumatología (International League of Associations for Rheumatology – ILAR) ha propuesto la siguiente forma de agrupación para este tipo de artritis infantil.
- AIJ sistémica inicial: Implica dolor o inflamación articular, fiebres y erupciones cutáneas. Este es el tipo menos común. pero puede ser el más severo. Aparenta ser diferente a los otros tipos de AIJ y similar a la enfermedad de Still inicial en adultos.
- Poliartritis: Involucra muchas articulaciones. Esta forma de AIJ puede convertirse en artritis reumatoidea. Puede comprometer 5 o más articulaciones grandes y pequeñas de las piernas y los brazos, al igual que la articulación de la mandíbula y el cuello. Se puede presentar el factor reumatoideo.
- Oligoartritis (persistente y extendida): Compromete de 1 a 4 articulaciones, por lo regular, las muñecas o las rodillas. También afecta los ojos.
- Artritis relacionada con entesitis: Se asemeja a la espondiloartritis en adultos y a menudo compromete la articulación sacroilíaca.
- Artritis psoriásica: Se diagnostica en niños que tienen artritis y psoriasis o enfermedades de las uñas, o bien han tenido algún familiar cercano con psoriasis.
Síntomas
Los síntomas de la AIJ pueden incluir:
- Articulación hinchada, roja o caliente
- Cojera o problemas para usar una extremidad
- Fiebre alta y repentina, que puede ser recurrente
- Erupción cutánea (en el tronco o las extremidades) que va y viene con la fiebre
- Rigidez, dolor y rango de movimiento limitado en una articulación
- Lumbago que no desaparece
- Síntomas generalizados como piel pálida, inflamación de los ganglios linfáticos y apariencia de enfermo.
La artritis idiopática juvenil también puede causar problemas oculares llamados uveítis, iridociclitis o iritis. Puede no haber síntomas. Cuando los hay, pueden incluir:
- Ojos rojos
- Dolor ocular, el cual puede empeorar al mirar a la luz (fotofobia)
- Cambios en la visión
Pruebas y exámenes
El examen físico puede mostrar articulaciones inflamadas, calientes y sensibles que duelen al moverlas. El niño también puede presentar una erupción. Otros signos incluyen:
- Inflamación del hígado
Inflamación del bazo
Inflamación de los ganglios linfáticos
Los exámenes de sangre pueden incluir:
- Factor reumatoideo
- Tasa de sedimentación eritrocítica (ESR)
- Anticuerpos antinucleares (AAN)
- Conteo sanguíneo completo (CSC)
- HLA-B27
- Algunos o todos estos exámenes de sangre pueden ser normales en niños con AIJ.
El reumatólogo puede colocar una pequeña aguja dentro de una articulación inflamada para extraer líquido. Esto puede ayudar a encontrar la causa de la artritis. También puede ayudar a aliviar el dolor.
El reumatólogo puede inyectar esteroides dentro de la articulación para ayudar a reducir la hinchazón.
Otros exámenes que se pueden hacer incluyen:
- Radiografía de una articulación
- Gammagrafía del hueso
- Radiografía de tórax
- ECG
- Examen regular de los ojos por parte de un oftalmólogo
Tratamiento
Cuando solo un número pequeño de articulaciones está comprometido, los antiinflamatorios no esteroides (AINE), como ibuprofeno o naproxeno pueden ser suficientes para controlar los síntomas.
Se pueden usar corticoesteroides para reagudizaciones más graves con el fin de ayudar a controlar los síntomas. Debido a su toxicidad, debe evitarse el uso prolongado de estos medicamentos en niños.
Los niños que tienen artritis en muchas articulaciones, o que tienen fiebre, erupción e inflamación de los ganglios pueden necesitar otros medicamentos. Estos medicamentos se denominan fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (DMARD, por sus siglas en inglés).
Ellos pueden ayudar a disminuir la hinchazón en las articulaciones o el cuerpo. Los DMARD incluyen:
- Metotrexato
- DMARD biológicos como agentes anti TNF, inhibidores de IL-1 o IL
Los niños con AIJ deben mantenerse activos.
El ejercicio ayudará a mantener los músculos y articulaciones fuertes y móviles.
Ejemplos de actividades que puede realizar un niño/adolescente con AIJ
- Caminar, montar en bicicleta y nadar pueden ser buenas actividades.
- Los niños deben aprender a hacer calentamiento antes de hacer ejercicio.
- Hable con el médico o el fisioterapeuta acerca de ejercicios que se deben hacer cuando el niño sienta dolor.
Los niños que experimentan tristeza o ira por su artritis pueden necesitar apoyo adicional.
Algunos niños con AIJ pueden necesitar cirugía, lo que incluye artroplastia.
Expectativas (pronóstico)
Es posible que los niños que tienen pocas articulaciones afectadas no tengan síntomas por un período largo de tiempo.
En muchos niños, la enfermedad se vuelve inactiva y causa muy poco daño a las articulaciones.
La gravedad de la enfermedad depende del número de articulaciones comprometidas. Es menos probable que los síntomas desaparezcan en estos casos. Estos niños son más propensos a tener dolor prolongado (crónico), discapacidad y problemas en la escuela. Algunos niños pueden continuar teniendo artritis cuando son adultos.
Posibles complicaciones
Las complicaciones pueden incluir:
- Desgaste o destrucción de las articulaciones (puede ocurrir en personas con AIJ más grave)
- Tasa de crecimiento lenta
Crecimiento desigual de un brazo o una pierna - Pérdida de la visión o disminución de la visión a raíz de la uveítis crónica (este problema puede ser grave, incluso cuando la artritis no sea tan seria)
- Anemia
- Inflamación alrededor del corazón (pericarditis)
- Dolor prolongado (crónico), ausentismo escolar
- Síndrome de activación macrofágica, una enfermedad grave que puede desarrollar AIJ sistémica.
¿Cuándo contactar al médico?
Saque primero una cita con su médico de cabecera (médico general) para que pueda referirlo al reumatólogo.
Lleve una bitácora o escriba en un cuaderno todos los síntomas, con fechas e intensidad si es posible. Anote si usted o su hijo notan síntomas de AIJ.
Indique a su médico si los síntomas empeoran o no mejoran con el tratamiento, o sí se presentan síntomas nuevos.
Prevención
No hay una forma de prevención conocida para la AIJ.
Nombres alternativos
- Artritis reumatoide juvenil (ARJ)
- Artritis infantil
- Artritis juvenil